Foto de Alx Kbrera |
El reinado de Elizabeth Ríos, Miss Gay Nicaragua 2013, empezó marcado por el escándalo y no es para menos pues hablamos de un evento que transgrede en medio de una sociedad patriarcal y machista. Luego que todos opinamos sobre si había o no homofobia en la crónica de Confidencial, si debería o no llamarse “Miss Trans” o si son los concursos de belleza el ideal para ser activista. Que importa lo que hayamos dicho, lo importante creo son los espacios de lucha que podemos aportar desde nuestras posibilidades.
En resumen sobre este tema, el periodista y Confidencial expresaron que “es una visión personal del periodista que comunica lo que vio. No hay en ningún momento la intención de ofender o menospreciar. El autor hace uso de recursos literarios y una narración desenfadada para contar la historia”. Una realidad que nos dolió a muchos y quizás la lección más importante para los organizadores es tener más cuidado en el acceso que ofrecen a los medios de comunicación pues si no quieren este tipo de textos tan reales, a como se que somos, deben tener más control. Ya para el periodista no tengo ningún comentario pues hay estilos de estilos, pero si para Confidencial y sus editores ya que es probable que el choque más fuerte fue leerlo avalado por la buena reputación que tienen en el periodismo.
Foto de Alx Kbrera |
A pesar de todo ello, la vida sigue y la hora de la verdad llego para el Miss Gay Nicaragua, porque la reina de la Diversidad tiene un doble reto ante la comunidad y la sociedad, debe demostrar que la corona que lleva en la cabeza no sólo sirve de adorno si no que le permite hablar en nombre de la Diversidad, tanto a nivel nacional como internacional. Además, sus organizadores deben saber enfocar sus esfuerzo y hacer de la organización una verdadera escuela donde no sólo se promueva la belleza del transformismo, también que se promueva el empoderamiento e involucramiento real en la lucha a través del activismo y la incidencia política, tal a como lo han dicho. Para mí no importan si es un concurso de trans u hombres que se visten de mujer o si creemos o no que refuerza estereotipos pues al final todos lo hacemos de una u otra manera y ninguno es dueño de una fórmula perfecta para hacer activismo, lo verdaderamente importante es lo que pueda lograr con su trabajo de cara a la sociedad.
Todo en la vida te enseña y te hace crecer, estoy seguro que la Elizabeth que recibió la corona no será la misma cuando la entregue, pero todo dependerá de ella y su disponibilidad de aprender e involucrarse verdaderamente en la lucha por los derechos humanos de la diversidad sexual. No bastará sólo con verse bonita siempre o ser impecable ante las cámaras, si así fuera y si en eso se quedará ahí si estarían reforzando estereotipos, deben ir más allá para demostrar el verdadero activismo que se puede hacer.
Con la gente nunca quedamos bien y menos si hablamos de un tema tan controversial, pero lo más importante es saber escuchar todas las opiniones, respetarlas, analizarlas y saber reconocer si tiene razón. De nada vale que nos sigamos criticando si al final todo sigue igual, lo que importa es ver de frente para seguir luchando por una sociedad más igual, aunque caiga en un cliché pero no hay otra forma de llamarlo.